sábado, 14 de agosto de 2010

A la memoria de Jorge Gabriel Pujol


Hay una información que da escalofríos, pero que lamentablemente, es parte de nuestra historia aunque sea la más oscura. Luego de analizarla considero que no la debemos eludir, por más polémica que resulte. Por eso, he puesto varias voces, muchos textos esclarecedores, datos y sitios web para ampliar la información.

El tema de seleccionar las notas que redacto, para hacer más placentera la lectura de mis blogs, ha sido siempre una constante de esta periodista.

No obstante, el conocer accidentalmente hoy una noticia, con una foto impresionante, me lleva a desglosarla y acercarla a mis amables lectores. Uno elige lo que desea leer y en este caso, advierto de antemano el contenido para que continúe quien considere importante su lectura.

Aclaro que no he subido la foto que acompañaba al texto, por respeto a toda esa gente que por años buscó a sus familiares desaparecidos durante la última dictadura militar.

Cuando aún resuenan en mis oídos las terribles palabras del represor Jorge Rafael Videla, argumentando sus crímenes, no logro entender a quienes dicen: ‘bueno, ya está, debemos seguir mirando hacia delante.’

No es mi intención, justificar a nadie, porque en democracia o no, un crímen siempre es un delito.

Y lo es más, si surge de quienes deberían resguardar la seguridad de los ciudadanos de un país.

Y lo es más, si con la consigna de “terminar con el terrorismo”, muchos jóvenes fueron arrancados de su entorno familiar, sin un juicio previo, ni averiguación de antecedentes siquiera y con la mera sospecha de que era terrorista, era secuestrado, torturado física y mentalmente y después ejecutado y arrojado a cualquier parte.

Y lo es más, si entre ellos, hubo mujeres embarazadas a quienes les arrancaron sus hijos de las entrañas, para entregarlos vaya a saber de que forma y a quienes, con total impunidad. O aquellas mujeres que aguardaban un hijo, después de una persecución política sin tregua, no llegaron a cristalizar el sueño de su bebé por nacer.

Y lo es más, si los que no lo sufrieron en carne propia estas terribles situaciones, se atreven a prejuzgar diciendo que uno habla con odio, cuando en realidad, se expresa desde el dolor de una pérdida irreparable.

Y lo es más, si muchos de los que vivieron este momento negro de la Argentina, nunca siguieron una gestión ante tribunales, porque la reparación económica, no le devuelve la vida a quienes amamos.

Y lo es más, si esos seres queridos que ya no están, vuelven una y otra vez cada mañana, cuando no podemos compartir el desayuno, acompañándonos su recuerdo por el resto de esa jornada y todas las que se suceden a lo largo de nuestras vidas, aunque no lo digamos.

Y lo es más, si entre los desaparecidos, hay gente común, sindicalistas, obreros, estudiantes, sacerdotes, periodistas, profesionales, Doña Rosa y un vecino, según el libro ya olvidado ‘Nunca Más’.

Y lo es más, si ese mal llamado “Gobierno de la reorganización nacional”, dividió al país para siempre, fue un desgobierno total y solo organizó masacres encubiertas en una errónea definición de la defensa nacional. De algo estoy segura “los crímenes de lesa humanidad” están por doquier en Argentina, desde los gobiernos de facto, hasta el exterminio de nuestras culturas originarias con un absoluto silencio e impunidad, además de otro crueles atentados que nos transformó en una sociedad ávida de justicia.

Y lo es más, si analizamos que deberían haber velado por el destino de un país a la deriva, donde murió mucha gente inocente y si hubo agresiones de índole externa como decían, se pasó a todos por el mismo tamiz, de una forma irracional.

No hay justificativo alguno y da vergüenza ajena, leer declaraciones o escuchar ese audio celosamente guardado de estos mercenarios que, respaldados en uniformes y galones jamás ganados por situaciones meritorias, hicieron de este país, una herida abierta que jamás podrá cicatrizar.

La noticia, la tomé de:
http://www.pilarcom.com/noticia_detalle.php?IdNoticia=3332Subo el hipervínculo tal cual salió publicado el 13.08.2010.

Su título reabre heridas y ya se vienen movilizando familias enteras a una lejana posibilidad de enterrar sus muertos’como Dios manda’ y que tengan esa paz que les fue arrebatada:

Identificaron los restos de 114 desaparecidos durante la dictadura, dice el título. Habrá resignación para los familiares que ya están identificando a sus deudos?

No me agrada hablar de esto. Me reaviva un lejano dolor imposible de superar. Y también, recuerdo a mi entrañable amigo Gabriel Pujol, de San Luis, desaparecido en la zona de La Paloma, cerca de Tigre, en Provincia de Buenos Aires. Es imposible no pensar que tal vez sea uno de esos 114 o tal vez, el mismo de la foto que no subí. Entonces...que alguien me diga como hace uno para superar semejante atrocidad?

Solo nos queda orar ante tanto horror, por los que se quedaron sin sus hijos, con las manos vacías y el corazón herido de muerte...por los padres, abuelos, hijos, hermanos, familiares y amigos, que esperan a los que un día salieron a la universidad con un libro bajo el brazo y nunca más volvieron.

Quiero leer la lista de quienes fueron esas 114 personas y a la vez, imagino lo que vendrá después en muchos hogares y es imposible no movilizar las fibras más íntimas de nuestro corazón.

Rescato de un foro lleno de resentidos, que se amparan detrás de un Nic para expresar odio y rencor, estas palabras:

En otros países, es UN DELITO EL NEGAR EL GENOCIDIO Y AUN MAS EL HACER APOLOGIA DEL MISMO AL JUSTIFICAR LO OCURRIDO.

LA NOTA DEL: 13/08/2010 lleva este título:
Identificaron los restos de 114 desaparecidos durante la dictadura

El Ministerio de Salud bonaerense, a través del Instituto de Hemoterapia y el Equipo Argentino de Antropología Forense, identificaron los restos de personas que vivían en el territorio bonaerense cuando fueron víctimas de desapariciones forzadas.
El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, a través del Instituto de Hemoterapia, y el Equipo Argentino de Antropología Forense, lograron identificar los restos de 114 personas que residían en territorio bonaerense y que fueron víctimas de desapariciones forzadas entre 1974 y 1983.

El trabajo, del que también participa la Secretaría provincial de Derechos Humanos, forma parte de la Iniciativa Latinoamericana para la Identificación de Víctimas de Desaparición Forzada que, en la Provincia, ya obtuvo muestras de 1.900 familiares que buscan saber si los restos hallados corresponden a sus seres queridos.

Para nosotros es una tarea fundamental poder contribuir desde el sistema sanitario provincial en materia de derechos humanos a fin de aliviar el dolor y la incertidumbre de tantas familias que fueron víctimas del terrorismo de Estado”, expresó Alejandro Collia, ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires.

Por su parte, la directora del Instituto Provincial de Hemoterapia, Nora Etchenique, explicó que “hasta el momento 114 familias que hacía décadas esperaban noticias de un familiar desaparecido, con el enorme dolor e incertidumbre que significa la ‘desaparición’, pudieron, de algún modo, cerrar el duelo de un episodio siniestro en la vida de tantos argentinos”.

La especialista explicó que junto con el Equipo Argentino de Antropología Forense y Derechos Humanos de la Provincia, lograron capacitar al personal sanitario y establecer 22 Centros de Toma de Muestras sanguíneas, que funcionan en hospitales públicos provinciales y Centros Regionales de Hemoterapia.

El Equipo de Antropología Forense, a pedido de la Justicia, exhumó desde 2008 restos humanos enterrados como NN en cementerios del Conurbano bonaerense, La Plata, centros clandestinos de detención y otros lugares de búsqueda, como la costa atlántica bonaerense.

A partir de allí, se convocó a los familiares a aportar una muestra de sangre para cotejar sus ADN con los de los restos hallados. Hasta el momento, se efectuaron 127 identificaciones a nivel nacional, de las cuales 114 correspondieron a residentes de la Provincia.

“Los familiares interesados deben dirigirse, en primera instancia, a la sede de la Secretaría Provincial de Derechos Humanos más cercana a su domicilio. Allí se les tomarán los datos y se indicará cuál es el Centro de Toma de Muestras Sanguíneas al que tiene que dirigirse”, explicó Etchenique.

¿Cuál es el procedimiento?

El presidente del Equipo Argentino de Antropología Forense, Luis Fondebrider, explicó que una vez exhumados, los restos son sometidos a un examen de laboratorio exhaustivo que les permite obtener datos clave como el sexo, la edad al momento de la muerte, perfil odontológico y enfermedades que padecía la víctima.

Luego, se efectúa el análisis genético de los restos óseos que más tarde son comparados con los de las muestras de sangre que hayan aportado los familiares.


Fondebrider detalló que toda persona que tenga un familiar desaparecido por causas políticas puede asesorarse sobre estos procedimientos a través de la línea gratuita del Equipo Argentino de Antropología Forense de lunes a viernes de 9 a 18 llamando al 0800-333-2334.

Los centros de toma de muestras dispuestos por el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires funcionan en los siguientes hospitales provinciales, municipales y centros de hemoterapia:


-Hospital Penna - Bahía Blanca
-Hospital Pirovano – Tres Arroyos-Pigüé-Carhué
-Hospital Julio de Vedia - 9 de Julio
-Hospital Piñeyro – Junín
-Hospital San José – Pergamino
-Hospital San Felipe – San Nicolás
-Hospital Eva Perón – San Martín
-Hospital Enrique Erill – Escobar
-Hospital San José – Campana
-Hospital Fiorito – Avellaneda
-Hospital Oñativia – Rafael Calzada
-Hospital Narciso López – Lanús
-Hospital Iriarte – Quilmes
-Hospital Güemes – Haedo
-Hospital Bravo de Lavignole – Morón
-Hospital Mariano y Luciano de la Vega – Moreno
-Hospital Vicente López y Planes – General Rodríguez
-Centro Regional de Hemoterapia – Mar del Plata
-Hospital Cura – Olavaria
-Hospital Blas Dubarry – Mercedes
-Hospital Posadas – Saladillo
-Instituto de Hemoterapia – La Plata



Un detalle para entender más la nota de este blog:


Desaparecidos por la dictadura argentina es el nombre con que se conoce a las personas que fueron víctimas del crimen de desaparición forzada durante el gobierno militar de la Argentina autodenominado Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983).

La Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, firmada en 1994, lo considera como un delito de lesa humanidad imprescriptible y lo define del siguiente modo:

Se considera desaparición forzada la privación de la libertad a una o más personas, cualquiera que fuere su forma, cometida por agentes del Estado o por personas o grupos de personas que actúen con la autorización, el apoyo o la aquiescencia del Estado, seguida de la falta de información o de la negativa a reconocer dicha privación de libertad o de informar sobre el paradero de la persona, con lo cual se impide el ejercicio de los recursos legales y de las garantías procesales pertinentes.


Según la wikipedia, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) es una organización no gubernamental y sin fines de lucro argentina de carácter científico creada en 1984 a iniciativa de las organizaciones de derechos humanos de la Argentina con el fin de desarrollar técnicas de antropología legal (antropología forense) que ayudaran a descubrir qué había sucedido con las personas desaparecidas durante la dictadura militar (1976-1983).

Desde el año 1998 ha trabajado en 30 países de Latinoamérica, África, Europa y Asia; en lugares como Bosnia, Angola, Timor Oriental, Polinesia francesa, Croacia, Kurdistán iraquí, Kosovo y Sudáfrica.

El EAAF fue pionero en el desarrollo de estas técnicas. Dijo el estadounidense Clyde Snow que: “por primera vez en la historia de la investigación de violaciones a los derechos humanos empezamos a usar metodología científica para investigar estos crímenes. Aunque empezamos de a poco, produjo una verdadera revolución en el modo en que se investigan las violaciones a los derechos humanos.

La idea de usar la ciencia en el área de derechos humanos comenzó aquí en la Argentina y ahora se usa en todo el mundo. El equipo llevó la idea a todo el mundo y ayudó a la formación de equipos en otros países como Guatemala, Chile, Perú. Los países europeos tienen ahora sus equipos de antropología forense. Pero los argentinos fueron los pioneros... Cuando comenzamos, ellos recibieron amenazas de muerte. Yo recibí algunas llamadas nocturnas extrañas pero como mi español era tan malo no entendía.”

Algunos de los científicos miembros del EAAF son: Clyde Snow, Luis Fondebrider, Darío Olmo, Silvina Turner, Mercedes Doretti, Patricia Bernardi, Anahí Ginarte, Rafael Mazzella, Daniel Bustamante, Carlos Somigliana, Miguel Nieva, Sofía Egaña, Cecilia Ayerdi, Andrea del Río, Douglas L. Cairns.

Si desean acceder textualmente a lo que el General Jorge Rafael Videla argumentó en un reportaje realizado por la periodista María Seoane, aquí lo transcribo:

No, no se podía fusilar. Pongamos un número, pongamos cinco mil. La sociedad argentina, cambiante, traicionera, no se hubiere bancado los fusilamientos: ayer dos en Buenos Aires, hoy seis en Córdoba, mañana cuatro en Rosario, y así hasta cinco mil, 10 mil, 30 mil. No había otra manera. Había que desaparecerlos. Es lo que enseñaban los manuales de la represión en Argelia, en Vietnam. Estuvimos todos de acuerdo. ¿Dar a conocer dónde están los restos? Pero ¿qué es lo que podíamos señalar? ¿El mar, el Río de la Plata, el Riachuelo? Se pensó, en su momento, dar a conocer las listas. Pero luego se planteó: si se dan por muertos, enseguida vienen las preguntas que no se pueden responder: quién mató, dónde, cómo.
El número de víctimas, continúa siendo incierto.

La CONADEP (Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas), creada al final de la dictadura por el gobierno constitucional de Raúl Alfonsín, tuvo por misión principal recibir denuncias en forma directa de víctimas y allegados, y elevarlas a la Justicia civil. En 1984, la Conadep presentó 8.961 casos. Pero los organismos de derechos humanos elevan la cifra a 30.000. Oficialmente, existen hoy 13.000 registros. La dictadura siempre ocultó las listas reales.

Primeros procesos judiciales en el, exterior
Durante más de 25 años las leyes de impunidad, como las de Obediencia Debida y Punto final impedían en Argentina llevar ante los tribunales penales a los acusados de delitos de secuestros, desaparición forzada, torturas, asesinatos en los años de la dictadura militar. Por este motivo, los organismos de derechos humanos y de familiares de los desaparecidos buscaron ayuda en el exterior, para alcanzar la verdad y la justicia. Desde 1985 se abrieron procesos judiciales en Italia, por los ciudadanos de origen italiano desaparecidos en Argentina.

Los juicios en Europa cumplieron un importante rol de presión al poder judicial y al gobierno argentino, que finalmente, tras casi 30 años después del Golpe de Estado, anularon las leyes de impunidad, para juzgar en el propio país a los acusados por los delitos de derechos humanos durante la época de la dictadura militar, y así evitar tener que extraditarlos al exterior, como o venían reclamando tribunales de España, Italia, Francia y Alemania.


El término leyes de impunidad puede referirse en Argentina, al concepto que abarca dos leyes y una serie de decretos presidenciales sancionados entre 1986 y 1990, mediante los cuales se impidió el juzgamiento o la ejecución de las condenas contra autores de crímenes de lesa humanidad:
la Ley de Punto Final (1986);
la Ley de Obediencia Debida (1987);
y los indultos decretados por Carlos Menem (1989-1990).


“Dinosaurios” de Charly García (1983), nos dice algo más:

Los amigos del barrio pueden desaparecer
los cantores de radio pueden desaparecer
los que están en los diarios pueden desaparecer
la persona que amas puede desaparecer.

Los que están en el aire
pueden desaparecer en el aire
los que están en la calle
pueden desaparecer en la calle.
Los amigos del barrio pueden desaparecer,
pero los dinosaurios van a desaparecer.

No estoy tranquilo mi amor,
hoy es sábado a la noche,
un amigo está en cana.
Oh mi amor,desaparece el mundo

Si los pesados mi amor
llevan todo ese montón de equipajes en la mano
oh mi amor yo quiero estar liviano.
Cuando el mundo tira para abajo
es mejor no estar atado a nada
imaginen a los dinosaurios en la cama

Cuando el mundo tira para abajo
es mejor no estar atado a nada
imaginen a los dinosaurios en la cama

Los amigos del barrio pueden desaparecer
los cantores de radio pueden desaparecer
los que están en los diarios pueden desaparecer
la persona que amas puede desaparecer.

Los que están en el aire
pueden desaparecer en el aire
los que están en la calle
pueden desaparecer en la calle.
Los amigos del barrio pueden desaparecer,
pero los dinosaurios van a desaparecer.

Los amigos del barrio pueden desaparecer,
los cantores de radio pueden desaparecer,
los que están en los diarios pueden desaparecer,
la persona que amas puede desaparecer.
Los que están en el aire pueden desaparecer en el aire,
los que están en la calle pueden desaparecer en la calle.
Los amigos del barrio pueden desaparecer,
pero los dinosaurios van a desaparecer

Y ma armo de valor para incluir la lista de los desaparecidos de San Luis, donde está mi amigo Jorge Gabriel Pujol, para nosotros "Bocha"

Carlos Juan Allende
María Teresa Bernasconi
Dante Bodo
Luis Cainfaila
Jorge Omar Cazorla
Domingo Idelgar Chacón
María del Carmen del Bosco de Allende
Carlos María Espoturno
Graciela Fiochetti
Rafael Roberto García
Félix Roque Giménez
Luis Isidro Guyet
Héctor Raúl Jofre
Leonor Rosario Landaburo de Catnich
Pedro Valentin Ledesma
Alejandra Margarita Lepido
Nolasco Leyes
Mauricio A. López
Carlos Luis Mansilla
Ana María Ponce
Jorge Gabriel Pujol
Jorge Reynaldo Ruarte
Jorge Luis Ruffa
Sandro Santana Alcaraz Castillo
Ricardo Enrique Saibene
Alfredo Felipe Sinopoli
Julio Everto Suárez
Rosario Anibal Torres.

Hay muchos sitios para ampliar la información. Yo te adjunto solo cuatro:
http://www.nuncamas.org
http://www.desaparecidos.org
http://juicioporlaverdad.blogspot.com/
Y concluimos esta nota, transcribiendo un párrafo del blog anterior:

jueves 12 de marzo de 2009
Se hizo justicia:

El Tribunal Oral de San Luis encontró culpables a los cinco policías y militares acusados de ‘delitos de lesa humanidad’ realizados durante la última dictadura y los condenó a prisión perpetua e inhabilitación de por vida con cumplimiento efectivo en cárcel común, dos de ellos en el penal de Marcos Páz en Buenos Aires y a los restantes en el servicio penitenciario local, en un veredicto que fue seguido por más de medio millar de personas que se dieron cita al lugar. Hay más información en:

http://apdhsanluis.blogspot.com/

Texto: María Evelia Pérez Nicotra
Foto: Desaparecidos en Argentina